Y oyó Moisés la voz de su suegro, e hizo todo lo que le dijo. Éxodo 18:24
Todo el pueblo de Israel acudía hasta Moisés en busca de consejos y soluciones para sus problemas, esto llegó a un punto en el que el líder de Israel estaba completamente saturado y absorbido por el trabajo. Pero Dios utilizó a su suegro Jetro para ofrecerle un fabuloso consejo. Moisés debía delegar y repartir la carga del pueblo entre hombres sabios y temerosos del Señor, de esta manera él podría dedicarse a la enseñanza, a profundizar en la ley y a guiar al pueblo de Dios.
Todos necesitamos contar con algún Jetro en nuestras vidas, personas sabias que nos aconsejen. Debemos orar y buscar a alguien con quien podamos caminar juntos, alguien a quien podamos contar todas nuestras cargas y le permitamos exhortarnos cada vez que nos estemos equivocando.
También es importante que los lideres y responsables aprendan a delegar trabajo para repartir las cargas. Debemos orar para que el Señor ponga cerca de nosotros a personas fieles que estén dispuestas a servir. La iglesia es un cuerpo vivo y cada miembro tiene una misión, todos hemos recibido por Gracia dones y talentos que debemos poner a la disposición del Reino de Dios.
Haz todo lo posible por ayudar y sostener a los lideres de tu iglesia, la carga que llevan es muy grande y necesitan personas a su lado con quien poder contar. Ayúdales en todo lo que puedas para que tengan tiempo de calidad y puedan atender las situaciones difíciles, puedan buscar el rostro y la voluntad del Señor para guiar al pueblo y no descuiden a su propia familia.