Génesis 12:2

“Y haré de ti una nación grande, y te bendeciré, y engrandeceré tu nombre, y serás bendición” Génesis 12:2

Estas palabras son CLAVE en la historia de la redención. Por medio de esta promesa el Señor comenzó a crear el pueblo y la nación de Israel. Dios entregó su Gracia a Abraham un hombre pecador e idolatra de Ur de los Caldeos. De su de descendencia finalmente nacería Jesucristo el Señor y el Salvador del mundo.

A lo largo del Antiguo Testamento la bendición solo la podías hallar estando bajo la cobertura de Israel, guardando y cumpliendo las ceremonias y las leyes que Jehová entregó a su pueblo, pero ahora nos encontramos en el tiempo de la Gracia y por medio de la persona de Jesús todos podemos ser bendecidos.

Todo aquel que confiesa a Cristo como Señor y Salvador de su vida inmediatamente comienza a formar parte del pueblo de Dios. Que afortunados y privilegiados somos cada uno de los creyentes. Somos BENDECIDOS por contar con Jesús y por tener a la persona del Espíritu Santo en nuestro corazón. En Cristo estamos realmente completos, ya no tenemos que buscar donde saciar nuestras almas porque CRISTO + NADA = TODO.