Id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén. Mateo 28:19 y 20
Estas palabras NO SON una recomendación, NO SON algo opcional, NO SON para aquellos que tengan el don, este fue el último GRAN MANDAMIENTO que Cristo entregó a todos sus discípulos. Dios en su soberanía ha decidido salvar a los incrédulos por medio de la predicación del Evangelio; y esa bendita responsabilidad y privilegio nos lo ha dado a cada uno de aquellos que somos sus hijos.
¿Desde cuando no compartes tu testimonio ¿Cuándo fue la última vez que anunciaste el Evangelio? ¿A quién estas discipulando para ser más como Cristo? ¿Has acompañado a alguien hasta las aguas del bautismo? ¿Estas enseñando las Sagradas Escrituras? Espero y deseo que tu vida esté girando alrededor de estas cosas, ya que esto es realmente el propósito, el llamado y la misión que tenemos de parte de Dios.
¡¡Cumple con la GRAN COMISIÓN!!. No te enredes en la vanidad y superficialidad que ofrece nuestra sociedad. Vive cada día con el deseo de extender el Reino de Dios, invierte todas tus fuerzas sembrando en el hermoso terreno de la eternidad. Haz nuevos discípulos para Cristo.