Salmo 102:25

Desde el principio tú fundaste la tierra, y los cielos son obra de tus manos. Salmo 102:25

Me sigue sobrecogiendo y aún me hace sentir pequeño cada vez que leo y medito en la eternidad y en el poder ilimitado de Dios. Él es el Creador de todo cuanto ven nuestros ojos. Este mundo es realmente impresionante, por medio de la naturaleza podemos imaginarnos y disfrutar como son algunos de los hermosos atributos de nuestro Señor.

Trata de ver las manos preciosas de Dios en el cielo, en el amanecer, en el atardecer y en el inmenso mar. Deseo que en este día puedas ver las huellas del Creador por medio de toda su obra y que sientas su presencia mientras el viento acaricia tu rostro. Todo cuanto existe nos habla de Él de su amor, de su misericordia y de su Gracia.