Ten misericordia de nosotros, oh Jehová, ten misericordia de nosotros. Salmo 123:3
Necesitamos día tras día y constantemente la misericordia de Dios sobre nuestras vidas. No hacemos absolutamente nada para ser merecedores de los beneficios que recibimos cada día de la mano del Señor. Todo lo que somos y todo cuanto tenemos es única y exclusivamente por la bendita misericordia de Dios.
Aún todos aquellos logros o cosas que hemos conseguido han sido posible gracias a la misericordia del Señor. Cada día fallamos y pecamos contra un Dios tremendamente Santo, en muchas ocasiones deberíamos caer fulminados por la justicia santa de Dios, pero como dice la palabra «por sus misericordias no hemos sido consumidos».
No olvidemos y seamos agradecidos que el Señor nos mira a través de la obra y la persona de Cristo. Valora en gran manera la misericordia porque es el atributo y el medio por el cual tenemos trato con Dios. Disfruta hoy de su misericordia porque nuevas son cada mañana.