Salmo 128:1

Bienaventurado todo aquel que teme a Jehová, que anda en sus caminos. Salmo 128:1

El ser humano trata por todos los medios de ser feliz y de encontrar la felicidad en muchos lugares o cosas. Lo que no sabemos es que toda la felicidad que podemos encontrar en el planeta tierra tiene una fecha de caducidad, todo aquello que te hace ser feliz en algún momento se terminará.

La felicidad terrenal es completamente pasajera, el dinero, la salud, el sexo, las drogas, tus hijos, familiares, tu matrimonio… Ninguna de estas cosas pueden llenar al ser humano. Un teólogo dijo: el hombre tiene un hueco en su corazón del tamaño de Dios.

Solo Dios nos puede hacer felices y solo él puede darnos la felicidad que tanto anhela nuestra alma. La felicidad solo la podemos encontrar temiendo al Señor y guardando su palabra. Cuando caminamos bajo la atenta mirada de Dios poniendo en práctica su buena, agradable y perfecta voluntad entonces comenzamos a experimentar la auténtica y verdadera felicidad.

Los cristianos somos las personas más afortunadas del mundo porque tenemos la felicidad de tener a Dios con nosotros. Valora, cuida y disfruta de tu relación con el único que te puede hacer Feliz.