Zacarías 6:12 “Así ha hablado el Señor de los ejércitos: Aquí está el hombre cuyo nombre es el Renuevo; él brotará de sus raíces y edificará el templo del Señor”.
En otra de las visiones, Zacarías comparó la coronación de Josué con el establecimiento final del Mesías. Cuando el Señor dijo que llegaría el hombre cuyo nombre es el Renuevo, estaba señalando a la venida de Cristo como Señor y Salvador. En los tiempos del Antiguo Testamento se tenían que preparar todas las cosas apuntando hacia el momento de la encarnación, pero por el contrario en el tiempo en el que nos encontramos nosotros estamos preparando nuestras vidas para la segunda venida de Jesús.
Todos los profetas, sacerdotes y reyes eran una sombra y un tipo del último profeta, sacerdote y rey que había de venir. Jesús es el cumplimiento de todo y Él es quien edificará el templo del Señor para siempre. Todo aquello que era superficial, ineficaz e imperfecto apuntaba hacía el cordero de Dios que quita el pecado del mundo. Cristo es absolutamente suficiente, en Él podemos hallar todo lo que necesitan nuestras almas.
En estos momentos Dios continúa edificando el templo de nuestras vidas donde mora y habita la persona del Espíritu Santo. Dentro de muy poco, el pueblo de Dios estaremos reunidos ante su presencia donde disfrutaremos por toda la eternidad. Si estás leyendo este devocional pero no tienes a Cristo en el centro de tu corazón, te animo a que corras en estos momentos hacia él en arrepentimiento y fe. Jesús desea abrazarte, restaurarte y salvarte para que puedas estar con el Padre por toda la eternidad.