1º Samuel 24:19

1º Samuel 24:19 “Porque ¿quién encuentra a su enemigo y lo deja ir sano y salvo? El Señor te pague con bien lo que en este día has hecho conmigo”.

Saúl junto a sus hombres buscaban intensamente a David con la intención de asesinarlo, pero de repente la situación cambió y el cazador estuvo a punto de ser cazado. David pudo con facilidad quitarle la vida a Saúl en el interior de una cueva, pero por el contrario le perdonó dejándolo marchar sano y salvo.

Cuando alguien nos trata con injusticia o nos hace algún tipo de daño, normalmente nuestro corazón clama y busca constantemente la venganza. El rencor, la ira y el odio no son el camino por el que debemos andar. Un verdadero discípulo de Cristo con la ayuda del Espíritu Santo debería de ser capaz de amar, orar e incluso bendecir a sus enemigos. Nosotros, los que somos hijos de Dios, estamos llamados a poner la otra mejilla y a perdonar 70 veces 7. Todo esto es una verdadera locura para los oídos de nuestra sociedad, pero no para aquellos que han sido transformados por el poder del evangelio.

Si estás siendo perseguido, si alguien te ha dañado o si tienes cuentas pendientes con alguna persona, no ataques ni dejes que tu alma tenga sed de venganza. Deja tu situación en las manos de Dios, recuerda que Él es soberano y que todo está bajo su control. Dios es un juez justo y suya es la venganza. Si tu corazón está lleno de perdón, amor y misericordia entonces podrás abrir la jaula y liberar a todos tus enemigos. Solo de esta forma tú también podrás ser libre y vivir en completa paz.