2º Crónicas 11:16

2º Crónicas 11:16 “Tras aquellos acudieron también de todas las tribus de Israel, los que tenían el propósito sincero de buscar al Señor, Dios de Israel; y fueron a Jerusalén para ofrecer sacrificios al Señor, el Dios de sus padres”.
 
En medio de un tiempo de muchísima decadencia espiritual donde gran parte del pueblo de Israel estaba sirviendo y adorando a otros dioses, aún quedaba un grupo de personas fieles que buscaban y adoraban al Señor con sinceridad.
Estos judíos no querían practicar la adoración a dioses falsos, por ese motivo estaban dispuestos a desplazarse hasta la capital de Israel para ofrecer sacrificios al Dios de sus padres.
 
A lo largo de la historia, Dios siempre ha contado con un remanente de personas que han permanecido fieles al Señor y a su Palabra. Hombres y mujeres que han recibido, guardado y protegido la fe genuina y los principios bíblicos que recibieron de sus padres. En todas las generaciones que han pasado por este mundo, Dios siempre ha tenido un pueblo que ha estado dispuesto a marcar la diferencia y a ir a contracorriente con el resto de las personas.
 
En nuestra actualidad, en pleno siglo XXI, podemos ver cómo, incluso dentro del terreno del cristianismo, muchos se están desviando de la sana doctrina, permitiendo la práctica del pecado y dejando que el sistema caído de este mundo se introduzca en el precioso huerto del Señor que es su iglesia. Pero en medio de este caos que estamos viviendo y que por cierto, con el paso de los años cada vez irá peor, Dios sigue contando con un remanente fiel. Te animo a que busques con sinceridad cada día el rostro del Señor, que te mantengas firme en la Fe y que defiendas las Sagradas Escrituras para que el poderoso mensaje del Evangelio siga avanzando de generación en generación para la gloria de Dios.