Daniel 11:2

Daniel 11:2 “Ahora yo te mostraré la verdad”.

De una manera profética y precisa, Daniel detalla la historia del Oriente Próximo, desde el tiempo en que vivía hasta el periodo intertestamentario y el fin de los tiempos. Aparentemente, al leer este capítulo podría parecer que esta historia tiene poca aplicación práctica para nuestras vidas. Sin embargo, que Daniel escriba con tal precisión acerca de lo que sucedería cientos de años después de él, sugiere dos cosas importantes que debería de animar a todos los creyentes.

Primero, estas profecías nos enseñan que Dios no es un simple observador distante o alguien que reacciona a lo que sucede en la tierra; más bien podemos ver claramente cómo Dios es el orquestador de absolutamente todas las cosas que suceden. Puesto que Él conoce el fin desde el inicio, no es difícil para Él revelar las cosas antes que estas ocurran. Su voluntad garantiza el cumplimiento de Su Palabra.

En segundo lugar, la precisión del cumplimiento de las profecías nos da confianza de que la voluntad de Dios sobre aquello que aún no ha sucedido ocurrirá en el tiempo establecido por el Soberano. Todo esto tiene que llenar nuestro corazón de gozo, paz y esperanza. Aunque nuestro mundo sea un verdadero caos todo está avanzando según los designios del Señor. Al final de los tiempos sabemos que el enemigo será completamente destruido y el pueblo de Dios disfrutará de la eternidad junto con Cristo, por los siglos de los siglos.