Isaías 7:3

Isaías 7:3 “La virgen concebirá y dará a luz un hijo, y le pondrá por nombre Emanuel”.
 
Desde que los seres humanos fueron expulsados del maravilloso huerto del Edén y de la dulce presencia de Dios todos nos encontramos habitando en este mundo caído. Estamos en medio de un caos de tempestad, oscuridad y sufrimiento, pero la profecía que recibió Isaías son palabras que ofrecen ánimo, gozo y sobre todo esperanza. Dios le dijo a su profeta que a través de una virgen nacería un niño muy especial el cual se llamaría Emanuel que significa Dios con nosotros.
 
Esta esta es la fantástica y gloriosa noticia que ofrece el mensaje del Evangelio. Nosotros somos absolutamente pecadores, vagamos perdidos por el desierto de este mundo y nuestro destino final son las llamas del infierno. Pero Dios que es rico en misericordia ha decidido enviar a su hijo Jesucristo para buscarnos, restaurarnos y salvarnos. Ahora, a través de Cristo, obtenemos el perdón de todos nuestros pecados y tenemos paz para con Dios.
 
En medio de cualquier situación por la que estemos atravesando y aunque el mundo se esté rompiendo a pedazos, aquellos que somos hijos de Dios podemos tener confianza en lo más profundo de nuestro corazón al saber que Emanuel camina a nuestro lado. Aunque esto es algo que sabemos, es importante que podamos saborear y meditar mucho más sobre esta increíble verdad. Dios viene con nosotros en cada paso del camino. Él nos cuida, nos sostiene, nos guía, nos protege y ha prometido llevarnos hasta sus brazos amorosos por toda la eternidad.