Lamentaciones 2:17

Lamentaciones 2:17 “El Señor ha hecho lo que tenía determinado, ha cumplido su Palabra, ordenada por él desde tiempo antiguo”.  
 
Lamentaciones, como su propio nombre indica, es un libro que muestra el lamento y la aflicción profunda que pasó el pueblo de Dios debido a la consecuencia de sus pecados. Durante años e incluso siglos, el Señor tuvo paciencia y misericordia para con los suyos. Pero Dios, que es un Dios justo, no puede barrer el pecado bajo la alfombra. Este libro trata de mostrarnos la perfecta y santa justicia de Dios, las consecuencias que podemos experimentar debido a nuestra rebeldía, pero también la esperanza que tenemos si miramos y clamamos al Señor.
 
A lo largo de la Biblia, y especialmente por medio del libro de Lamentaciones, podemos ver claramente cómo a Dios no le tiembla el pulso a la hora de tener que disciplinar a su pueblo y a cada uno de sus hijos. El Señor no sólo castigó a Egipto, Babilonia, Sodoma, Gomorra, a los Filisteos, Amalecitas o Moabitas… Él también disciplinó y castigó al pueblo de Israel y a muchos de sus siervos.
La Palabra nos recuerda que Dios, al que ama disciplina. Y esta, aunque parezca una contradicción, es una evidencia más de su amor hacia nosotros.
 
En ocasiones podemos estar sufriendo debido a la consecuencia de nuestro pecado o simplemente porque nos encontramos viviendo en medio de un mundo caído. Sea cual sea la tribulación que estemos atravesando, jamás debemos de olvidar que Dios, en su absoluta soberanía, ha determinado y permite todo lo que nos sucede para nuestro bien y santificación. ¡Qué descanso saber que pase lo que pase nos encontramos en todo momento en las manos del Dios que nos ama!