Nehemías 4:11

Nehemías 4:11 “Nuestros enemigos dijeron: Que no sepan ni vean hasta que entremos en medio de ellos, los matemos y hagamos cesar la obra”.
 
En el momento que el pueblo decidió dejar la comodidad para levantarse y edificar las ruinas de la ciudad, todos los enemigos también se levantaron para burlarse, desanimar y detener la obra. Ellos se enfadaron tanto que incluso propusieron introducirse en el interior del pueblo con sutileza para tratar de matar a todos aquellos que estaban edificando.
 
Esto es precisamente lo mismo que sucede cuando un creyente decide dejar el banquillo de la religiosidad para edificar su vida, su familia o la iglesia. En el preciso instante que decidimos consagrarnos, servir y luchar contra el pecado el diablo se levanta para oponerse y tratar de detenernos. No debemos de olvidar que los cristianos tenemos muchos enemigos y que estos solo atacan a aquellos que se han levantado para edificar. Si por el contrario vives cruzado de brazos y simplemente te dedicas a ir a la iglesia y ser un consumidor probablemente no tendrás muchas luchas ni oposición.
 
El verdadero cristianismo es aquel que te lleva a luchar en medio de una batalla espiritual. Si cada día te quitas el pijama, te pones la ropa y dejas en el armario tu armadura, entonces probablemente no estés realizando la misión ni extendiendo el Reino de Dios. Te animo a levantarte y a edificar, pero recuerda que en el momento que lo hagas muchos enemigos tratarán de burlarse y de paralizarte. Pero no olvides nunca que mayor es el que está con nosotros que el que viene contra nosotros.