Salmo 4:4-8

Meditad en vuestro corazón estando en vuestra cama, y callad. En paz me acostaré y asímismo dormiré; porque solo tú, Jehová, me haces vivir confiado. Salmo 4:4-8

Estás palabras son muy conocidas y hermosas pero muy difíciles de poner en práctica. Lamentablemente vivimos en medio de una sociedad tan activa y con tantos ruidos y distracciones que hemos perdido la disciplina de la meditación.

Nos haría mucho bien a nuestra alma apartar cada día de un tiempo donde poder meditar en tranquilidad en la persona de Dios, en su palabra, en nuestra manera de actuar. Además no solo se nos anima a meditar sino a estar callados y en silencio, algo que prácticamente ha desaparecido de este mundo. Qué difícil es poder estar en silencio.

Cuando en medio de las aflicciones y problemas que todos tenemos logramos meditar en el Señor y estar en silencio escuchando su voz, entonces podemos dormir completamente en paz porque sabemos y sentimos que el Señor está a nuestro lado a pesar de todas las tempestades.

Vive confiado, Dios está a nuestro lado.